Para qué nos vamos a engañar, The Big Bang Theory está llegando a su tramo final. Y no me refiero a los últimos episodios de esta temporada, sino al final de la serie. El elenco tiene contrato hasta la temporada 12, y si las audiencias acompañan, CBS podría estar interesada en continuar, pero el tema del dinero es una seria espada de Damocles sobre la continuidad de la serie.
Además, algunos miembros del elenco han dado señas de querer hacer otras cosas. Y considerando esta realidad, uno debe ponerse serio y empezar a pensar en el digno final que todos deseamos para una serie que nos ha dado diversión por más de una década.
Volví a plantearme esta cuestión a raíz del lanzamiento del primer «teaster» del revival de «Roseanne», serie en la que Lorre fue parte del equipo de escritores y en la cual coincidió por primera vez con Laurie Metacalf, Sara Gilbert y Johnny Galecki. Pero también es la serie que tiene el dudoso honor de aparecer casi siempre en los listados de series con los peores finales jamás escritos.
Roseanne (1988-1997) fue una sitcom irreverente que por primera vez nos mostró a una familia «real» en televisión, los Conner, una familia de la clase baja trabajadora.
El controvertido final de la serie fue este: Roseanne abre los ojos en los últimos minutos del episodio final y reconoce que su marido Dan murió hace ya un año. Todo lo que vivió desde entonces fue una invención de su cabeza, un modo de sobrellevar la cruda realidad. ¿Por qué se inventaron este final? Bueno, fue un recurso desesperado para enmendar el desastre que fue la última temporada, en el cual la familia se ganó la lotería y técnicamente estalló por los aires la premisa del show.
Aunque Chuck Lorre no tiene la culpa de ese desastre, fue despedido antes de llegar a este punto, es un buen antecedente de series que acabaron calamitosamente. Y como verán, Chuck Lorre se ha encargado de construir sus propios desastres, tal como ocurrió con Roseanne. A las pruebas me remito.
Fue la serie que recuperó a Cybill Sheperd (luego del éxito de «Luz de Luna») y nos descubrió a Christine Baranski (¡Beverly Hofstadter!). Luego de muchas aventuras juntas, las amigas y protagonistas Cybill (Cybill Sheperd) y Maryann (Christine Baranski) acaban siendo arrestadas por intento de asesino.
En el episodio final, Cybill es despedida de su trabajo y Maryann hace explotar la propiedad de su esposo el Dr. Dick, como venganza, luego que este le robara los ahorros de su vida. Las cosas acaban muy mal, cuando son arrestadas por intento de asesinato por la policía (Cybill como amiga de la perpretadora debe ser su cómplice) y nos dejan en la estacada de saber qué pasa con las amigas, aunque todo parece indicar que terminan con sus tristes huesos en la cárcel.
Este tipo de final que se conoce como un «Bolivian Army Ending», que es como se llama a los finales en los que los protagonistas, luego de superar mil obstáculos, enfrentan dificultades imposibles y te dejan con la pregunta si sobrevivirán. Alude a una película sobre los famosos delincuentes Butch Cassy y Sundance Kid, que huyeron a Bolivia escapando de la justicia estadounidense; pero finalmente son rodeados por el ejército boliviano. Sin posibilidades de escapar, y rechazando la posibilidad de rendirse, ambos pillos toman sus armas y se enfretan al ejército boliviano… la película termina en ese punto y nunca los vemos morir.
Aunque Chuck Lorre fue despedido por Cybill Sheperd en la segunda temporada, según algunas fuentes, posteriormente fue llamado de regreso para algunos episodios, incluso el episodio final aparece acreditado a él y otros escritores.