Si el título no te intrigó, tal vez lo haga saber que el episodio comenzó con Raj contándole a todos que Halley, de un año de edad, lo mordió. Sí, están pasando cosas extrañas en el universo de The Big Bang.
La buena noticia es que Leonard todavía tiene casa, luego del desastre con Bill Gates de la semana pasada, Penny no lo echó del departamento. En cambio, todo lo demás está como siempre; es viernes por la noche y todos, menos los niños que nunca hemos visto de Howard y Bernadette, están reunidos. Se sirve comida china comprada. Todo está bien.
Hasta que llega Penny con un sándwich de pastrami del food truck (camión restaurante o gastroneta) y se esparció el típico olor a salsa de soya, pollo moo shu y albóndigas fritas en el departamento ese viernes por la noche. Ni siquiera como sándwiches de pastrami, pero el programa me ha dado motivos para probarlos. De hecho, después de la primera pausa comercial, estando ya en el departamento de Sheldon y Amy, todavía seguimos hablando del sándwich.
Sheldon no puede concentrarse en su trabajo porque no puede dejar de pensar en el sándwich, —y el olor— que ahora se expande hasta los pisos superiores del edificio. También ayuda que Sheldon tenga la ventana abierta, pero no soy la policía de la comedia. De todos modos, Amy le sugiere ir por el sándwich, si no puede de pensar en ello, pero Sheldon no quiere alimentar sus impulsos. Todo lo que sé es que, si fuera Pascua, estaría yendo a la tienda judía más cercana a comer pastrami en pan de centeno. Este episodio me está dando hambre.
Eventualmente, vemos otra historia: Raj y Howard están en el jacuzzi, cuando encuentran un dron tirado entre los arbustos (Me alegra que Howard tenga tanto tiempo, como para sumergirse en un cubo de basura sobre el suelo, mientras Bernadette cuida de sus dos hijos de menos de dos años). Están todos intrigados con el dron, yo no.
Y cuando regresamos con Penny y Leonard, seguimos hablando del condenado sándwich. ¿Sigue siendo el día de los Inocentes? Por favor, díganme que estoy viendo el episodio equivocado (Spoiler: no lo estoy).
Unos 60 segundos después, Penny se entera de que un inquilino del edificio se ha quejado sobre la ubicación del caminón de pastrami y este ya no puede estacionarse ahí. ¿Qué ha ocurrido? El caos, aparentemente. Penny y Leonard asumen que es Sheldon y no se equivocan. Pero es que Sheldon no solo presentó la queja a la asociación de inquilinos, resulta que Sheldon es la asociación de inquilinos.
Volvamos con Howard y Raj, que están enamorados del nuevo dron de juguete. Bernadette —que aparentemente no tiene suficiente en qué pensar— propone buscar al dueño mirando en la tarjeta de memoria. Si la historia del pastrami todavía no me atrae, esta seguro que no lo hará.
Volviendo con el pastrami, Amy se entera que Sheldon es la asociación de inquilinos. Penny y Leonard quieren expulsar a Sheldon de la presidencia, pero todo se reduce al voto de Amy (¿no hay más inquilinos?), que deberá ir contra su prometido. ¿Podemos pasar al episodio de la semana próxima? Aparentemente, se trata de las despedidas de soltero de Sheldon y Amy, y me interesan más eso que lo que veo en vivo frente a mí.
Pero como nunca dejo una tarea sin terminar, no dejaré de escribir de este episodio, al que le faltan 11 minutos. Amy le sugiere en secreto a Leonard y Penny, que consigan que otros inquilinos voten en contra de Sheldon (como dije) y así el problema se solucionará. Excepto porque estamos a mitad del episodio.
Mientras tanto, Howard, Raj y Bernadette descubren que el dron le pertenece a una chica muy guapa y Raj quiere conseguir salir con ella, devolviéndole el dron a su legítima dueña. Déjenme ir al grano y arruinar esta parte: Raj y Howard consiguen la dirección de la chica en la tienda de cómics de Stuart, Raj devuelve el dron, consigue el número de la chica, pero arruina todas sus posibilidades cuando ella ve la memoria del dron, justo cuando Raj está hablando espeluznantemente sobre sus calzoncillos y casarse con ella. Asco.
Hora de volver con el sándwich: Resulta que Sheldon no está registrado en el contrato de arrendamiento, luego de mudarse con Amy al viejo departamento de Penny, así que no puede ser presidente de la asociación de inquilinos. Sin embargo, gracias a un tecnicismo (que te ahorraré aquí), sigue siendo inquilino de hecho. Pero luego de una discusión sobre Ant-Man, Sheldon decide transferirle el poder a Leonard. No sin antes, prometer que le hará la vida imposible.
Y eso amigo míos, es el final del episodio. Vaya a buscar un sándwich de pastrami, comida china o lo que sea y vuelva por aquí la semana próxima, cuando hablaremos de las fiestas de Amy y Sheldon antes de su boda.
Esta entrada se publicó originalmente como ‘The Big Bang’ Theory Season 11 Episode 19: Sheldon and Leonard Fight Over a Sandwich, por Jessica Radloff en la versión digital de la revista Glamour, en inglés. Nosotros la hemos traducido lo mejor que podemos para el fandom en español.