El reciente programa de Conan O’Brien nos ha dejado algunos momentos dignos de recordar, aquí mismo hemos mencionado el segmento donde Johnny Galecki y Mayim recrearon apasionadamente su primer beso en televisión.
Hoy nos toca hablar de Kaley Cuoco, por quien sus compañeros de reparto guardaban un secreto rencor. Al menos así lo reveló O’Brien durante su programa, para consternación de Jim Parsons, que no podía creer lo que oía.
¿Memoria eidética? No, pero casi
Conan tuvo que aclarar que se refería, más que odio, a una molestia porque Kaley aparentemente no necesitaba estudiar sus guiones, entonces, hasta el propio Jim estuvo de acuerdo de que tal molestia existía. Y Johnny comentó divertido que Kaley realmente no estudia, porque a veces «ni abre los guiones». Y tampoco se los lleva a casa para estudiar, sino que los tiene amontonados en su camerino.
Para Jim, eso significa que Kaley es muy inteligente, porque mientras ellos en el set están hasta último momento, sufriendo por tratar de memorizar bien sus diálogos, Kaley se les acerca, le echa una mirada al guion y ya está lista para grabar sus escenas. Y lo hace perfectamente, bueno, casi siempre.
Kaley no sabe el porqué puede memorizar tan bien sus líneas, y recordó que Simon le decía que ella se pasaba leyendo revistas y no sus guiones durante los ensayos. «Creo que ellos están un poco celosos», dijo poniéndose algo seria. Luego se apresuró a aclarar que también tiene que ver con que sus líneas no contiene «cosas difíciles», como pueden ser, por ejemplo, los términos científicos que tienen los diálgoso de (algunos) de sus compañeros de reparto.
En la parte final del video, O’Brien mostró una (vieja) foto de Johnny tratando de «decapitar» a Kaley, con una espada que según precisa Johnny se trataría de la serie «Juego de Tronos» (Game of Thrones). Kaley se había quedado profundamente dormida durante un descanso durante los ensayos (algunos pueden ser muy largos, sobre todo cuando se tienen que hacer correciones y mejoras al guion).
Realidad y ficción
Como verán, se trata de una divertida anécdota que O’Brien ha querido exagerar para provocar al público. Estoy seguro que muchos fans podrían malinterpretar este titular (que es una copia del que aparece en la página del programa de O’Brien), pero no tendrían por qué, ya que es bien sabido que hay un buen ambiente en el grupo.
Si bien eso no significa que todos sean grandes amigos como se muestra en la pantalla, porque se trata de un elenco muy variado, con intereses y personalidades muy diferentes.
Sin embargo, también son muy profesionales, se respetan, se aprecian y eso también se nota en las grabaciones y en el excelente ambiente de trabajo que cultivan desde hace años.