Farándula

Kunal Nayyar abandona Instagram a causa de mensajes de odio

Los Golden Globes 2018 serán recordados por ser una de las ceremonias más políticas de los últimos tiempos. Lo cual era más o menos previsible, tras el enorme escándalo ocurrido el año pasado alrededor de la figura de Harvey Weinstein, uno de los productores más poderosos de Hollywood. Un reportaje del New York Times destapó las desgarradoras historias de varias actrices abusadas y acosas por el todopoderoso productor.

El escándalo desencadeno una serie de denuncias similares dirigidas a otras figuras de la industria, como el actor Kevin Spacey, el comediante Louis C. K. o el director de Pixar, John Lasseter. Entre muchos otros. Y aunque en menor medida, las actrices y otras celebridades femeninas también fueron afectadas, pues fueron acusadas de mantener un silencio cómplice, ya cada vez iba quedando más claro que los abusos de Weinstein era ampliamente conocidos en el medio. Y nadie hizo nada durante años, incluyendo muchas actrices que trabajaron para él, hicieron fortunas con sus películas y hasta se consideraban amigas personales del otrora todopoderoso productor.

Todo este preámbulo sirva para ponerlos en antecedentes de cómo Hollywood intenta proyectar ahora, la imagen de repudia estos hechos y desea erradicarlos de la industria del espectáculo y todos los ámbitos. De manera que, cuando surgió la campaña Time’s Up, que pedía a las celebridades vestir de negro para la ceremonia de los Golden Globes, como protesta por todos los abusos y el silencio que se guardó tantos años sobre el tema, todos estuvieron más que dispuestos a hacerlo.

La cuestión es que Kunal Nayyar no fue invitado a los Golden Globes y mientras se realizaba la ceremonia, él se encontraba asistiendo a un partido de basquetbol entre Los Ángeles Lakers y los Atlanta Hawks. Y durante el juego decidió compartir ese momento de diversión con una fotografía de las porristas, en un ángulo de abajo hacia arriba, y utilizando, entre otros, los hashtags #GoldenGlobes (Globos de Oro) y #BoysNight (Noche de Chicos). Y esta publicación detonó una serie de comentarios llenos de críticas cargadas de odio e insultos.

Los quejosos afirmaban que el «mensaje» de Kunal era inadecuado e insultante (imagino que por fotografiar a porristas, es decir, mujeres atractivas que son elegidas por sus habilidades físicas ante todo) y que se estaba burlando del movimiento contra el acoso sexual #MeToo y #TimesUp, que pretende poner fin al sexismo en Hollywood y todos los sectores profesionales.

Harto de la situación, Kunal decidió cortar por lo sano y abandonar las redes sociales. El mensaje que ha dejado es este (la foto está en negro, no es un error):

«Me he dado cuenta de que exponer mi vida a través de imágenes permite demasiada contribuciones/críticas/odio/consejos que yo no pedí o solicité. Pero esa es la naturaleza real de compartir la privacidad de mi vida a través de internet. Por mucho que lo intenté, nunca sentí que fuera lo mío. Mi relación de amor/odio con Instagram llega a su fin. En general, extrañaré todas las fotos de tus mascotas. Adios por ahora a mis queridos amigos, ámense como si fuera su último aliento».

Y así estamos amigos, Kunal Nayyar es otra víctima colateral del radicalismo de pensamiento que se viene imponiendo en EEUU sobre ciertos temas, en los cuales tienes que ser prácticamente perfecto y leer la mente de los demás, para anticipar si lo que escribes, en un momento de diversión y entretenimiento, no ofenderá a alguien. Y si esto no se convertirá en el detonante que convoque a una verdadera horda de gente dispuesta a decirte lo que debes decir y creer a base de sarcasmos e insultos. Nunca habíamos visto tamaña forma de malinterpretar y malpensar sobre lo que hacen los demás. Un error, incluso involuntario, y para esta gente eres un monstruo que no merece ninguna consideración. Hemos perdidos completamente la proporción de las cosas.

Un agradecimiento especial a la página Mayim Bialik Latinoamerica, sin la cual no me habría enterado del asunto.