Semana de videojuegos y excesos en la reseña de esta semana de Young Sheldon cuando Sheldon haga nuevos amigos al relacionarse con los chicos del dormitorio de al lado en la universidad. Mientras George descubrirá que su trabajo está en peligro.
Una pequeña advertencia, nuestra reseña tiene spoilers, ten eso en cuenta si aún no has visto el episodio.
Heridas al crecer
No nos vamos a engañar, Missy siempre ha sido una niña algo superficial y dependiente de las modas. Mientras Sheldon es capaz de ir a contracorriente (incluso cuando no debería), Missy sigue siempre la corriente principal.
Comenzamos viendo a Missy de compras con su mamá y Meemaw. Y temprano comienzan los problemas, pues Missy piensa que su madre le está «arruinando la vida», porque esta se niega a comprarle ropa que teóricamente no debería poder usar en el colegio.
Por suerte, Missy tiene a Meemaw siempre dispuesta a ganarse a sus nietos haciendo de la «abuela buena» frente a los «padres malos». Cosas de la vida, muchos abuelos malcrían a los sus nietos porque ya no tiene la obligación moral de disciplinarlos como hicieron con sus propios hijos.
En fin, Missy obtiene una pequeña victoria al comprarse la falda corta que quería. Y la lleva al colegio pese a la negativa de su madre. Es realmente tierno verla radiante cuando se ve al espejo con su nuevo atuendo.
Sin embargo, lo que viene después no tiene nada de tierno. pues recibe la hiriente crítica y burla de unas compañeras en el colegio, debido a que omitió un detalle importante de su apariencia.
Luego vemos a una Missy devastada y hecha un mar de lágrimas que llega a la casa de Meemaw. Como adulto me resulta fácil pensar que la reacción de la pequeña fue exagerada. Ahora, como yo también fui un adolescente lleno de inseguridades debo decir que… igual me parece exagerado.
Hasta que uno entiende que el verdadero problema no son los comentarios de las amigas de Missy. Al fin y al cabo, las palabras se las lleva el viento. No, la desesperación de la niña es porque ella empeoró las cosas al intentar arreglar el problema sola.
Y eso le dejó muchas muchas heridas, estas sí literales.
Y claro, no podía pedirle ayuda a su madre, pues había hecho todo a sus espaldas. Ese es uno de los problemas de ser deshonesto. En otras circunstancias, de seguro Mary se lo habría enseñado, pues ella lo hace como mujer adulta.
Aunque en la vida real la actriz Raegan Revord ya tiene 14 años, en el show Missy tienes apenas 12. Así que encuentro natural que ese no sea un tema relevante. Sigue siendo una niña por mucho que se vea tan crecida. A esa edad los vellos no debería importarte todavía.
Pero para Missy y sus amigas sí es importante, pues están desesperadas por verse más adultas y sofisticadas.
Por suerte, Missy tiene a Meemaw, que se convierte en su paño de lágrimas, le da apoyo emocional, cura sus heridas y le brinda algunos consejos (unos buenos, otros malos). Al menos le da un poco de perspectiva: excepto la muerte, todo tiene solución en esta vida.
Lo que me chirrió más fue el comentario victimista al azar que ponen en los labios de Missy: «Los chicos la tienen más fácil». No Missy, los chicos no la tienen más fácil, ellos deben lidiar con sus propios problemas, como la presión de ser fuertes o atléticos, que los hombre no lloran, no deben quejarse, etc.
Que tú no los conozcas no significa que no existen. Y eso funciona también en sentido inverso, para los chicos que piensan que las chicas lo tienen más fácil.
Nuevos amigos y nuevos problemas
Sheldon descubrirá el mundo de los videojuegos de la mano de un par de simpáticos muchachos que viven al lado de su dormitorio en la universidad: Darren (Caleb Emery) y Oscar (Ivan Mok).
A Darren ya lo habíamos visto antes, es el muchacho que quería un lugar para leer y acabó siendo el único miembro del club que organizó Sheldon en la universidad.
Esta trama se desarrolla simultáneamente con los problemas laborales de George, debido a que los patrocinadores o donantes de la escuela no están contentos con su labor al frente del equipo de fútbol americano.
Se organiza una reunión para calmar los ánimos que no acaba nada bien, dejando a George al borde del despido.
Es justo entonces que Sheldon llama a casa pidiendo permiso para pasar la noche en la universidad para trasnocharse con sus amigos jugando Calabozos y dragones.
George atiende la llamada de Sheldon y le da permiso para no dormir en casa. Ante todo porque no quiere ir a recogerlo, las cosas como son.
Esto provoca una pelea entre George y Mary que acaba con George revelando sus preocupaciones y que Mary finalmente entienda por qué su esposo está de tan mal humor. Una nueva crisis se cierne sobre la familia Cooper.
Pese a todo es un momento muy conmovedor para la pareja, apoyándose en ese momento de incertidumbre, algo con lo que todos podemos identificarnos en los tiempos difíciles que nos ha tocado vivir.
Y es un momento que la pareja ya necesitaba, después de tantos episodios rondando el tema de la infidelidad.
Para rematar las cosas, el primer intento de trasnocharse de Sheldon acaba mal. Libre de las restricciones de su madre, Sheldon come más de la cuenta y se provoca una indigestión de dulces y jugo.
No sé si todos se habrán dado cuenta, pero el episodio nos muestra las consecuencias de no hacerle caso a nuestros padres, por muy estrictas que nos parezcan sus reglas. Por mucho que parezca que nos «arruinan la vida».
Es verdad que para crecer, los padres deben dejar que los hijos tomen sus propias decisiones. Y es inevitable que los hijos eligirán mal al principio, sufran las consecuencias y aprendan de sus equivocaciones.
Al menos en teoría. Tiene lógica, pero como me dijo mi propio padre: «Es sabio el que aprende de sus errores, pero es más sabio el que aprende de los errores de los demás».
Lo que más me gustó
- -Sheldon: «Y como ya estaba en la universidad, podía llevar chicas a mi dormitorio». -Mary: «Ya está, tendida y limpia».
- -Oscar: «¿Quieres pasar?» -Sheldon: «No, vine a quejarme». -Oscar: «Vino a quejarse». -Darren: «Que no pase». -Oscar: «No puedes pasar».
- -Petersen: «Diles algo alentador (a los patrocinadores)». -George: «Está bien, entiendo». -Petersen: «Y dícelos como si tu trabajo dependiera de ello… No es que dependa… Pero así es».
- -George: «¿Y el café?» -Georgie: «Yo me lo acabé». -George: «Cuando uno lo acaba debe preparar más». -Mary: «¿Existe esa regla?» -George: «Para él, sí».
- -Georgie: «Los (pantalones que me compró mamá) los corté y los volví cortos». -Missy: «¿Y sirvió?» -Georgie: «No, me parecía a Sheldon». -Missy: «Qué tragedia».
- -Mary: «Él no está listo para esas situaciones». -George: «Mary, es un buen chico. No va a beber nada que no deba. Y si le preocupara la presión de grupo, no usaría esa corbata de moño».
De errores y detalles que no gustaron
De momento, no tengo nada. Más adelante, y quizás con la ayuda de ustedes, pueda actualizar esta parte de la reseña de Young Sheldon.
Puntuación del editor
No fue un episodio con muchos momentos divertidos. A estas alturas es lo normal en Young Sheldon. Puntaje medio.
Sheldon comienza experimentar la «vida universitaria», sigue el drama adolescente de Missy, mientras George y Mary tienen su momento en medio de otra crisis inminente en la familia. Puntaje medio.
Un guion ingenioso que abre un nuevo arco acerca del trabajo de George, ¿será que lo perderá?. Puntaje: medio.
Episodio en línea de Young Sheldon
Alternativa 2
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Puntaje de los fans de Young Sheldon
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